Alberto Contador, que a partir del sábado comenzará la defensa del Tour de Francia que logró el año pasado, ha considerado "ridículas" las sospechas de dopaje que pesan sobre él y aseguró que tiene asumido que será "el más controlado" en la presente edición de la ronda gala.
"Me parecen ridículas las sospechas. Desde principios de temporada nadie ha pasado más controles que yo y, como ha quedado demostrado, sigo ganando en cada carrera que voy. Tengo claro que en este Tour voy a ser el más controlado", ha afirmado el ciclista de Pinto en Les Herbiers, lugar próximo al inicio de la carrera.
El español, que está pendiente de una resolución del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) sobre su presunto positivo por clembuterol en el Tour del año pasado, se muestra confiado en que se demuestre su inocencia.
Le recuerdan sus exequipos
Contador se vio obligado a responder a numerosas preguntas sobre su posible positivo, incluida una que recordó que los diferentes equipos por los que ha pasado se han visto envueltos en casos de dopaje.
"Mi postura siempre ha sido de tolerancia cero con el dopaje", ha respondido el madrileño con una sonrisa en los labios. Contador niega que las sospechas de dopaje le supongan una presión suplementaria en este Tour, una carrera que ya de por sí es muy exigente.
"El Tour es la carrera de más presión mediática y también desde el punto de vista deportivo. Voy a intentar mantenerme concentrado en la prueba y olvidar todo lo demás. He venido a disputarla y a hacerlo bien", ha dicho.
El Giro pesa
Pese a todo, el ciclista de Pinto reconoció que tiene dudas sobre su posible victoria final, por el hecho de haber disputado el Giro de Italia y porque el recorrido no le es favorable.
"Es la primera vez que hago doblete y además de forma consecutiva. Alguna duda tengo de cómo me voy a encontrar, no sé cómo me va a reaccionar el cuerpo. El Giro fue muy difícil y no sé cómo me voy a encontrar", ha indicado.
La carretera decide
El hecho de llegar con más fatiga a la edición de 2011 puede marcar la forma en la que afronte la carrera, reconoció Contador, quien sin embargo ha precisado que no saldrá con un planteamiento conservador si se encuentra en condiciones.
"El planteamiento dependerá de cómo vaya la carrera. Soy un corredor que si me encuentro en condiciones y con buenas piernas me cuesta mucho frenar. La primera semana será difícil y ya veremos cómo me encuentro en la montaña, que es donde se decidirá la carrera", ha señalado.
Contador fija al luxemburgués Andy Schleck como su principal rival de la presente edición, pero también alertó del riesgo que puede venir de "ciclistas veteranos que han preparado el Tour a conciencia o de jóvenes que pueden dar el salto de calidad".
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